Nacho Vegas estrena "Mundos Inmóviles Derrumbándose"

Es mejor decirlo desde ya, por si estas líneas cogen al lector con prisa: Mundos inmóviles derrumbándose es el mejor álbum de Nacho Vegas hasta la fecha. Esto no es una frase promocional, ni ese lugar común de los artistas cuando dicen, casi siempre porque necesitan creerlo así, que su última obra siempre es la mejor. En el caso de Vegas, este nuevo álbum revitaliza y pone al día cada elemento que ha servido para convertirlo en un referente musical ineludible para toda una generación, y en uno de los más grandes escritores de canciones que ha dado nuestro país en las últimas décadas .

Tras más de 20 años de carrera profesional en la música, Mundos inmóviles derrumbándose surge, no como un álbum de madurez, sino como un álbum de plenitud. Todo lo que ha hecho grande a Nacho Vegas en el pasado está aquí: la pluma afilada, la introspección, la aguerrida crítica social, lo íntimo y confesional, y esas melodías que se instalan en el oyente desde la primera escucha. El asturiano se abre en canal en cada canción y ofrece todo lo que tiene dentro, con un compromiso muy difícil de ver en la música actual, y reinventándose en pleno siglo XXI con un sonido más luminoso y orgánico.

Para ello se ha formado una nueva banda que se nutre de viejos colaboradores, como Joseba Irazoki o Manu Molina, y la incorporación decisiva de Hans Laguna, Ferrán Resines y Cristian Pallejà, que también han sido los responsables de la grabación y mezclas del disco. Además de ellos, colaboraciones de lujo como las de Mursego, Mancha 'E Plátano, el Coru Antifascista Al Altu La Lleva y toda una delegación de jóvenes talentos catalanes en los vientos y las cuerdas que arropan algunas de las canciones, ayudan a perfilar el sonido de un Mundos inmóviles derrumbándose.

El disco no es una simple colección de nuevas canciones: casi podremos decir que funciona como una exposición en la que el oyente avanza de la mano de Nacho, parándose en cada pieza para contemplarla con atención y sumergirse en cada frase, cada melodía, cada emoción , cada historia narrada con pinceladas certeras que cobran vida nueva en cada escucha. Todo ello conectado por la personalidad de Nacho y por la expresividad magnética de su voz, que suena hoy mejor que nunca: más sincera y más rotunda, intensa en algunos momentos, quebradiza en otros, y siempre al servicio de la canción, esa obra última que, en este disco, trasciende a todo lo demás. Desde los deslumbrantes estribillos de «La flor de la manzana» o «Big Crunch» a la sensibilidad desbordante de «El don de la ternura», pasando por la desgarradora «Ramón In», la ácida «El mundo en torno a ti» o la melancólica «Y esta noche nunca acaba», todo en Mundos inmóviles derrumbándose empieza y acaba en las canciones. Porque Nacho Vegas y sus canciones son, en esencia, una misma cosa.

Con dos décadas de trayectoria cumplidas este año, Nacho Vegas es una de las voces más respetadas en el ámbito de las músicas populares tanto en el Estado como en América Latina. Ha colaborado con multitud de artistas reconocidos, entre los que destacan Christina Rosenvinge y Enrique Bunbury, con quienes publicaron sendos trabajos compuestos a cuatro manos. Actualmente está a punto de publicar un nuevo disco, que verá la luz en los primeros meses del año próximo y es sin duda uno de los lanzamientos más esperados del 2022 tanto en España como en América.

Pocos pueden escribir canciones tan íntimas e incisivas al mismo tiempo como esta. En ella Nacho Vegas construye una fábula moderna sobre universos que chocan, sobre la frustración que provoca luchar por salvar a alguien que te importa un ecosistema tóxico que ha construido a su alrededor. Intentar levantar la venda de los ojos de quien no quiere ver es más duro cuánto más egocéntrico y alienado es su mundo, por mucho que uno siga intentándolo. Con cadencia reflexiva, una melodía narrativa que discurre apaciblemente con la letra y un ritmo firme y pausado, Nacho canta a esa frustración, pero no desde el resentimiento, sino desde la melancolía que provocan las cosas imposibles de conservar.

El cantante asturiano  Nacho Vegas  se alista para regresar al país y sobre todo a la capital mexicana para ofrecer lo mejor de su música y presentar su nuevo disco de estudio llamado  Mundos Inmóviles Derrumbándose . La cita para esta bohemia musical será en las siguientes fechas:

17/03 Guadalajara/Teatro Diana
18/03 Monterrey/Auditorio 70
19/03 Tijuana/Black Box
22/03 Toluca/Salón Rojo del Club Toluca
23/03 Querétaro/Teatro Metropolitano
24/03 Cuernavaca/Teatro Ocampo
25/03 Puebla/Teatro DCU
26/03 CDMX/Teatro Metropólitan

Para su visita a la CDMX, Nacho Vegas estará arropado de importantes músicos sobre el escenario entre los que se encuentran Manu Molina, destacado baterista de formación clásica y musico activo de jazz y folk.Asimismo, lo acompañará el polifacético guitarrista Joseba Irazoki, quien cuenta con una destacada carrera que incluye su paso por Athom Rumba, su proyecto experimental en solitario y su paso con Nacho que va desde el 2013. A ellos se unen sus compañeros Hans Laguna, bajista , cantautor, músico experimental y productor y Ferrán Resines, tecladista que ha formado parte de la exitosa banda Love of Lesbian.También, se verá en vivo al productor y técnico Cristian Pallejà, responsable del sonido del álbum, y la lista la cerra la multi-instrumentista berlinesa vinculada al jazz, Juliane Heinemann.

Foto: Cortesía.