Explora el legado prehispánico en estas rutas de vestigios rupestres
La región de California, que se extiende desde Los Ángeles hasta Baja California y algunas áreas de Sonora, fue fundada por cinco pueblos originarios: Cucapá, Cochimí, Kumiai, Paipai y Kiliwa.
A pesar de que Baja California destaca por ser una región multicultural que atrae a personas de diversas partes del mundo, también es un lugar que atesora el legado de distintas civilizaciones prehispánicas.
La región de California, que se extiende desde Los Ángeles hasta Baja California y algunas áreas de Sonora, fue fundada por cinco pueblos originarios: Cucapá, Cochimí, Kumiai, Paipai y Kiliwa.
Explora el mundo prehispánico de Baja California y su patrimonio a través de la pintura rupestre de:
Senderos Ancestrales por Tecate y Ensenada
El Vallecito, ubicado en Tecate, es un destino fascinante para los amantes de la arqueología. Aquí encontrarás rocas grabadas con petroglifos que representan animales, símbolos y figuras abstractas. Estas manifestaciones artísticas, realizadas por los antiguos habitantes de la región, ofrecen una visión intrigante de su cosmovisión y formas de vida.
Este sitio arqueológico es considerado sagrado por muchas comunidades nativas de la región y es testimonio de la conexión espiritual con la tierra. Además, El Vallecito cuenta con una serie de senderos que te permitirán explorar la zona y disfrutar de la belleza natural del lugar.
Esta ruta te conducirá hacia uno de los sitios de arte rupestre mejor conservados del noreste de México: San Vicente Ferrer. En este lugar, ubicado en Rancho la Llave, los visitantes podrán apreciar una pared rocosa de 10 metros de altura cubierta de petroglifos con diseños geométricos y líneas rectas.
Disfruta de la belleza natural del Valle de Guadalupe mientras te maravillas con las pinturas blancas y rojas en un peñasco frente al Rancho el Milagro. Además de las pinturas rupestres, podrás deleitarte con la gastronomía más vanguardista de México y disfrutar de la Ruta del Vino.
Vestigios de San Quintín
Esta ruta te permitirá explorar la historia milenaria de los Cochimíes, que se establecieron en el área desde El Rosario hasta Loreto. Cerca de la Misión de San Fernando Velicatá se ubican Las Pintas, un conjunto asombroso de petrograbados y pinturas rupestres entre cerros. Los dibujos en estilo abstracto representan tablas utilizadas en ceremonias de curación por antiguos chamanes.
Cerca de Las Pintas, también se encuentra la Misión de San Fernando Velicatá, un sitio que resguarda, a orillas del arroyo del mismo nombre, la belleza de los petroglifos que resaltan las expresiones de los primeros pobladores de la región. Este arte rupestre sobresale gracias a los diseños geométricos en color naranja, con la presencia de una cruz latina y un barco de vela que sugiere influencias posteriores a la llegada de los españoles.
Bahía de los Ángeles y su legado milenario
Esta región es conocida por haber albergado a los primeros misioneros de la entidad, como la Misión de Santa María de los Ángeles o la Misión de San Francisco. Sin embargo, también resguarda el pasado de sus pueblos originarios. La zona de Cataviña te permitirá adentrarte en las profundidades de la tierra y descubrir la enigmática cueva pintada. Se trata de un tesoro arqueológico con más de 3 mil años de antigüedad, con pinturas rupestres en techos semiesféricos que muestran cuadrados, triángulos, soles y espirales en diversos colores.
También por esta ruta se encuentran las pinturas rupestres de Montevideo, que ofrece una experiencia al pasado a través de pinturas de tipo figurativo abstracto a lo largo del arroyo de Montevideo. Aquí, las representaciones de animales y figuras geométricas enriquecen el paisaje rocoso. No te pierdas las ruinas de la Misión de San Borja, ubicada en las cercanías.
Foto: Cortesía.