La cultura coreana se apoderó de la fiesta cervantina
La agrupación de K-Pop demostró la presencia de los jóvenes en el FIC 50
La segunda jornada del Festival Internacional Cervantino (FIC) continuó con la muestra artística de la cultura coreana en intercambio con México, con espectáculos de danza, música y teatro.
En la primera función de Laboratory Dance Project, el público asistente agradeció con una ronda de cinco minutos de aplausos a los 14 bailarines al culminar la primera función de su obra Ceniza en el Teatro Principal de Guanajuato, con localidades agotadas. Su presentación estuvo a cargo del director artístico y coreógrafo de la agrupación Dongkyu Kim.
Este montaje marca el regreso del grupo a los escenarios del Cervantino, después de 15 años de ausencia en la Fiesta del Espíritu. La agrupación nació en 2001 y con sus coreografías han buscado expandir el valor artístico del baile y en su repertorio tiene contenido filosófico.
En Ceniza, los bailarines saltan al escenario enfundados en conjuntos de color oscuro y acompañados de sonidos que evocan a los incendios de carbón o madera, para después dejar cenizas. Le siguen sonidos de cauces de agua, con lo cual los ejecutantes realizan movimientos fluidos y reflejan su plasticidad al dejar llevar la corriente de energía en sus cuerpos y extremidades.
Laboratory Dance Project contará con una segunda y última función este viernes 14 de octubre a las 18 horas en el Teatro Principal de Guanajuato, las localidades también ya se encuentran agotadas.
Por otra parte, la cultura popular de Corea se vio interpretada por la agrupación de k-pop mixto Kard, la cual, entre gritos, aplausos, coros y convocó a jóvenes mexicanos que esperaron desde primeras horas del día en la explanada de la Alhóndiga de Granaditas.
La agrupación inició con el tema Ring the Alarm, ¡parte de su quinto mini álbum Re, del cual también forman parte las canciones Breakdown y Whip!, canciones que estrenaron en vivo en México.
Como parte de la interacción con los jóvenes cervantinos, la cantante Somin práctico su español con la frase “México está que arde”, seguida del vocalista BM, que continuó con el clásico “Viva México”. Finalmente, el público méxicano agradeció una hora de éxitos de k-pop con aplausos, gritos y hasta peluches en el escenario.
Además, el Mesón de San Antonio se convirtió, como todos los años, en el escenario de una de las tradicionales puestas en escena del Teatro Universitario de Guanajuato: Retablillo Jovial.
La obra basada en el libro de Alejandro Casona y montada por Enrique Ruelas en 1953 tuvo esta noche la primera de las cuatro funciones que ofrecerá este año en el festival. En la función, el público no paró de reír con las ocurrencias de los personajes de las tres piezas que integran la puesta en escena, principalmente con “La farsa y justicia del Corregidor”, cuyos actores recibieron generosos aplausos. Los que dieron vida a las piezas “Mancebo que casó con mujer brava” y “La Fablilla del secreto bien guardado” también recibieron un cálido recibimiento al final de la función.
Por otra parte, la Ópera de Bellas Artes dio la primera función de La carrera de un libertino, con música de Ígor Stravinski y libreto de Wystan Hugh Auden y Chester Kallman.
El estreno de la coproducción realizada entre el FIC y la Ópera de Bellas Artes relata la historia de Tom Rakewell, un joven quien está enamorado de Anne Truelove, a quien desea como esposa.
No obstante, conoce a Nick Shadow, quien le menciona que un tío desconocido recién fallecido le heredó una fortuna. Tras ello, Tom deja a su pareja, parte a Londres con el fin de cobrar la herencia y Nick se ofrece a asistirle en esos trámites y ser su criado. En el camino, nuestro protagonista se da una vida de excesos y hedonismo.
Sin embargo, después de exactamente un año y un día, Nick le exige a Tom el pago de su salario, el cual consiste en cederle su alma. Para ello, juegan una partida de cartas con el fin de echar al azar el destino del alma de Tom, quien termina por ganar la partida, pero en venganza, Shadow lo hunde en la locura.
El escenario cuenta con al menos nueve cambios en la posición de sus elementos, lo cual lo vuelve una obra dinámica, a la vez que refleja la evolución de la vida misma del protagonista.
Al final de su presentación y tras una ronda de aplausos y ovaciones del público, los intérpretes recibieron un arreglo hecho con hojas de maíz por parte del festival.
La carrera de un libertino tendrá una segunda función este 14 de octubre a las 21 horas en el Teatro Juárez.
Foto: Cortesía.