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Adoptar la IA en el control de calidad, una necesidad estratégica

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La norma ISO 9001:2015 establece los requisitos para un sistema de gestión de calidad y la Inteligencia Artificial garantiza la detección de No Conformidades.

La norma ISO 9001:2015 establece los requisitos para un sistema de gestión de la calidad (SGC) que asegure la mejora continua y la satisfacción del cliente, entre los aspectos clave de esta norma está la detección y gestión de no conformidades, es decir, cualquier incumplimiento de los requisitos establecidos por la organización o la norma.

La inteligencia artificial (IA) emerge como una herramienta crucial para identificar, analizar y gestionar no conformidades con una precisión y eficiencia sin precedentes. A continuación, se menciona cómo la IA puede apoyar específicamente el cumplimiento de la ISO 9001:2015.

Detección temprana y precisa de No Conformidades

Requisitos Normativos: La ISO 9001:2015 requiere que las organizaciones identifiquen y controlen las no conformidades en productos y procesos (cláusula 10.2).

Contribución de la IA.

Análisis de Datos en Tiempo Real: Utilizando sensores y dispositivos IoT, la IA monitorea continuamente los parámetros de producción. Al detectar anomalías en tiempo real, la IA puede señalar desviaciones antes de que se conviertan en no conformidades serias.

Modelos Predictivos: Los algoritmos de machine learning analizan datos históricos y actuales para predecir fallos futuros, permitiendo a las organizaciones tomar medidas preventivas.

Monitoreo continuo y automático.

Requisitos Normativos: La norma exige un monitoreo y medición constante del SGC para asegurar su eficacia (cláusula 9.1).

Contribución de la IA.

Automatización del Monitoreo: La IA permite un seguimiento continuo y automático de los procesos, comparando los resultados reales con los criterios de calidad establecidos. Esta vigilancia 24/7 garantiza la detección inmediata de cualquier no conformidad.

Alertas y Notificaciones: Los sistemas basados en IA pueden enviar alertas automáticas a los responsables cuando se detecta una desviación, permitiendo una respuesta rápida.

Análisis de causas raíz.

Requisitos Normativos: La ISO 9001:2015 requiere la identificación de las causas raíz de las no conformidades y la implementación de acciones correctivas (cláusula 10.2.1).

Contribución de la IA.

Análisis Avanzado de Datos: Utilizando técnicas de análisis de datos y aprendizaje automático, la IA puede identificar patrones y correlaciones complejas que pueden pasar desapercibidos en análisis manuales.

Diagnóstico Preciso: La IA proporciona diagnósticos precisos de las causas raíz, facilitando la implementación de acciones correctivas específicas y efectivas.

Gestión de documentación y cumplimiento

Requisitos Normativos: La norma establece la necesidad de mantener documentación adecuada y actualizada del SGC (cláusula 7.5).

Contribución de la IA.

Gestión Automática de Documentos: Los sistemas de IA pueden organizar, actualizar y revisar automáticamente los documentos del SGC, asegurando que toda la información esté alineada con los requisitos normativos.

Auditorías y Registros: La IA ayuda a mantener registros precisos de auditorías internas y externas, revisiones de gestión, y acciones correctivas y preventivas, facilitando la demostración de cumplimiento durante las auditorías.

Optimización del desempeño organizacional.

Requisitos Normativos: La ISO 9001:2015 enfatiza la mejora continua del SGC y la optimización del desempeño organizacional (cláusula 10.3).

Contribución de la IA.

Eficiencia Operativa: Al mejorar la detección y gestión de no conformidades, la IA reduce costos asociados con reprocesos, desperdicios y fallos de calidad.

Satisfacción del Cliente: La capacidad de proporcionar productos y servicios de alta calidad de manera consistente mejora significativamente la satisfacción del cliente.

Impacto Ambiental: La optimización de procesos y la reducción de desperdicios contribuyen a minimizar el impacto ambiental de las operaciones.

Para terminar.

La integración de la inteligencia artificial en el sistema de gestión de la calidad conforme a la norma ISO 9001:2015 representa un avance significativo en la capacidad de las organizaciones para detectar y gestionar no conformidades.

Al proporcionar herramientas avanzadas para el monitoreo continuo, el análisis de causas raíz y la gestión de documentación, la IA asegura que las empresas no solo cumplan con los requisitos de la norma, sino que también mejoren continuamente sus procesos y resultados. En un entorno empresarial cada vez más competitivo, la adopción de IA en el control de calidad es una necesidad estratégica para alcanzar la excelencia operativa y la satisfacción del cliente.

Por Luis Gerardo Villanueva.

Foto: Especial.