Clausura del Parlamento de Mujeres del Congreso CDMX 2022
Igualdad de oportunidades y una vida libre de violencia para las mujeres, principales ejes que se acordaron.
Al clausurar el Parlamento de Mujeres 2022, la presidenta de la Comisión de Igualdad de Género del Congreso de la CDMX, Ana Francis López Bayguen Patiño, indicó que el Parlamento de Mujeres se trabaja desde la Comisión de Igualdad de Género como un ejercicio de sororidad que permite reconocer, continuar y nutrir una vida libre de violencia para las mujeres y las niñas, pero, dijo: “no podemos hablar de feminismo si no nos ocupamos antes de la pobreza y de la desigualdad económica, por ello, esta Comisión instaló el Cuarto Parlamento de Mujeres, habiendo elegido a 66 parlamentarias de la CDMX, observando antes los territorios de cada una, para poder tener así la mayor pluralidad posible, con una lógica de las poblaciones prioritarias”.
Durante la clausura, Ana Gabriela Rubio Escobar, presidenta de la Mesa Directiva del Parlamento de Mujeres, informó que éste estuvo integrado por 66 parlamentarias que conformaron cinco grupos parlamentarios con los nombres de: Rosa Luxemburgo, Hermila Galindo, Emmeline Pankhurst, Eva Perón y Ana Brnabić. Asimismo, continuó, “se conformaron 11 comisiones que le dieron vida y esencia a los trabajos de este ejercicio de participación ciudadana y se logró la aprobación de 21 dictámenes que serán enviados a la Comisión de Igualdad de Género para su estudio y posible aprobación; quedando pendientes de dictamen, múltiples iniciativas que también buscaban abonar a una agenda para las mujeres de la CDMX.
“Además, es importante destacar que la razón por la cual no alcanzamos a dictaminar muchas de las iniciativas presentadas, estriba en que como parlamento registramos un ausentismo elevado, tanto en las sesiones como durante el trabajo en comisiones, siendo eso, mucho de lo que adolece la lucha de las mujeres en nuestra ciudad, pedimos diálogo, conquistamos espacios y sólo unas cuantas terminan generando avances y luego se les acusa de no incluir a todas, o bien de estar escindidas de la realidad de las mujeres que han optado por la violencia, pero cuyas exigencias también son parte de la lucha feminista”.
De igual forma, la diputada Rubio Escobar estimó de suma importancia el enorme avance que se logró en términos de visibilidad para las mujeres lesbianas al afirmar que, “quienes somos parte de la diversidad sexual, pero que la agenda de ésta no nos incluye por estar secuestrada por hombres blancos y heteronormados que durante décadas no han sabido o no han querido incluirnos en sus demandas, somos mujeres que amamos a otras mujeres y ello no debe de significar que tengamos menos derechos”.
"De esta manera, agregó, uno de los objetivos de este parlamento fue el buscar el diálogo entre las diferentes corrientes que forman parte del feminismo, pero hay algo que nos enfrenta, y, cuando nos enfrentamos entre nosotras, el patriarcado es el que gana. Este parlamento, desde su convocatoria se manifestó como trans incluyente y a pesar de ello hubo manifestaciones que bajo argumentos biologizantes y cargados de odio intentaron imponer su visión en cuanto al género y a la propia identidad de lo que implica ser mujer. Con la división el patriarcado triunfa y a nosotras, a todas, nos siguen matando”.
Durante el evento de clausura estuvieron presentes representantes de los cinco grupos parlamentarios, quienes, en su totalidad, reconocieron a la Comisión de Igualdad de Género el hacer posible el haber podido continuar con estos ejercicios y hacerlos vinculantes con el trabajo legislativo. A su vez, la diputada Nancy Núñez, integrante de la Comisión de Igualdad de Género, reconoció también el compromiso de todas las parlamentarias que llegaron hasta esta clausura, ya que señaló: “el feminismo es una forma de vivir individualmente y de luchar colectivamente y esto tiene que ver con el compromiso que le dan a la lucha por la igualdad, ya que el feminismo no es de ocasión, sino de convicción”. Y coincidió con la legisladora López Bayguen al reiterar que “la igualdad de género no puede existir si no existe una igualdad de clases y para ello, debemos combatir también la desigualdad social, la precarización que nos ha traído el sistema neoliberal”.
Para finalizar, López Bayguen aceptó que uno de los retos más grandes fue el lograr alcanzar la tolerancia y el respeto a las ideas de cada una de las participantes, trabajando desde una perspectiva feminista y con una participación horizontal; ya que, dijo, “en esta vida hay ciertas posturas que hay que tomar, y para mí la inclusión, la paz y los derechos humanos para todas las personas no se negocian, incluidos los de los que nos matan. Y ha sido difícil lograr puntos de acuerdo y convergencias para llegar a una construcción de paz, pero el feminismo es eso, un movimiento de paz, con toda la fuerza, con toda la furia y todo el amor, pero es un movimiento de paz”.